Los años 60

Hasta el año 1960, no se definieron los colores y vestimentas que llevarían los cofrades para procesionar, los cuales fueron elegidos en Junta de Gobierno tras la propuesta del establecimiento “Virgen de los Llanos” y delegado en la modista Dña. María Villada. Así mismo, se indica que tuvo que obtener permiso del Sr. Obispo para que las mujeres pudieran desfilar tras la imagen con mantilla, vestidas de negro y guante blanco.

Mujeres desfilando tras la imagen

Además, también puede destacarse de lo que sería la primera banda, aunque no de la propia cofradía, “Los Cruzados”, los cuales eran un grupo de niños y jóvenes que fueron enseñados musicalmente hablando por el párroco D. José Baeza. La primera procesión que tuvo la imagen fue en la Semana Santa de 1960, dicha procesión se intentó realizar a hombros, pero debido a su excesivo peso, a mitad de procesión tuvo que retirarse a unas cocheras próximas. Las primeras andas fueron compradas a la cofradía del Ecce Homo de un pueblo de Cuenca, posteriormente, en 1963, se realizaron unas nuevas, las cuales son las actuales del Stmo Cristo de la Misericordia y fueron confeccionadas por D. Manuel Gómez Alfaro como carpintero y D. Nerón Reolid Ruiz como tallista. El alumbrado corrió cuenta de Emilio Maset Camacho, todo ello se cifró en 30.000 pesetas (180,30 €). Además, destacar de este primer desfile que ya estaba prohibido dar caramelos Viernes Santo, que se procedió a la subasta de los puestos, que el primer capataz fue D. Adolfo Roldán Gómez y el mayordomo de procesión sería D. Antonio Milla Cuesta. También ya en este “primer” año completo se crea la celebración de la misa del 15 de Septiembre tras la cual se impondrían las medallas a los nuevos cofrades. Así mismo, comenzó otro acto ya convertido en rito como es el Besapiés del Sábado Santo.

Besapiés del Sábado Santo, 1960

La cofradía iba creciendo poco a poco por las zonas de bajada de la Cárcel, Puente Madera, Carretas y en todos esos lugares limítrofes, donde cada año la devoción por la sagrada imagen iba creciente. Durante estos duros años de posguerra, tenían que prestarse o alquilarse las túnicas para que los nazarenos pudieran salir en procesión. Ya en 1963 se contaba con 357 cofrades. Por la rotación de cargos, a parte del citado D. Manuel de León, también actuaron como Hermanos Mayores rotatorios personas como D. Pedro López Álvarez, D. Jesús Fernández Ruiz o D. Adolfo Roldan Gómez.


Otro de los actos que calaron hondo entre todos fue el de que los recién nacidos en el momento de su bautizo eran puestos a los pies de la Virgen como símbolo de respeto y petición de protección. Retransmisiones radiofónicas de novenarios, coronas, triduos, rosarios, viajes, cines, obras de teatro y más actos se daban en el seno de la cofradía para dar mayor realce a la figura de Ntra. Sra. de las Angustias.


Años más tarde, en abril de 1965, D. Gonzalo Botija Cabo, Alcalde de Albacete, y con ocasión de que el Consistorio de nuestra ciudad, diera el nombre de una de las nuevas calles el de "Virgen de las Angustias", como muestra de agradecimiento, se le otorgó a perpetuidad al máximo representante del Excmo. Ayto. de Albacete, el cargo de Cofrade de Honor, dicho cargo también es otorgado al Obispo de la Diócesis D. Arturo Tabera así como al presidente del Tribunal Superior de Justicia D. Francisco Ruiz Jarabo. Dicha calle está situada en pleno Barrio de Franciscanos. Además, en ese año gustó recordar que Ntra. Sra. de la Esperanza "La Macarena" de Albacete, donó los primeros velones que llevaría el trono en Semana Santa.


 


Una de las figuras principales de esta primera época, D. Rafael García Casas, secretario desde la fundación, dejó la cofradía para trasladar su domicilio a Madrid por motivos laborales, siendo sustituido por D. Ramón Fernández Martínez. Se adquieren en esta década capillas pequeñas de la virgen, las cuales hasta bien entrados los años noventa iban de casa en casa por todo el barrio del hospital. Otra de las anécdotas que pueden destacarse son la precisión con la que se contaba una vez puestos todos los años, las cuarenta docenas de claveles que llevaría el trono de la Virgen los Viernes Santo.


También cabe memorar que en el año 1966 se estrenó el manto de procesión de Ntra. Sra. de las Angustias, confeccionado en terciopelo negro con bordados a mano en hilo fino de oro con motivos florales, geométricos y de la pasión. Lo remata un sencillo y fino canutillo de oro a lo largo de su perímetro, fue confeccionado por las Carmelitas Descalzas de Albacete. Tuvo un precio de 100.000 ptas. (601,01 €), para su desembolso total hubo que realizar un préstamo con la Caja de Ahorros Provincial.